domingo, 30 de junio de 2019

FRANCISCO GOMEZ. Escultor ALESSANDRO BIGGI

FRANCISCO GÓMEZ  Escultor ALESSANDRO BIGGI

Fotos personales tomadas el 6 de mayo de 2019 y 1º de marzo de 2022

Como muchas veces no tengo suficientes fuentes confiables de información tengo que construir hipótesis y comparaciones para llegar a algún tipo de certezas.
Esta obra indudablemente tiene estrecha relación estética con la bóveda de JUAN BERISSO VIGNALI Y SOLARI. La imagen del dios Cronos son idénticas. Acompaño una imagen del Monumento Funerario dedicado a Deolindo Muñoz, quien fuera intendente de la Ciudad de Rosario para ver la similitud del ángel. En el caso de las esculturas de la Bóveda de Berisso no hay dudas que son el escultor italiano ALESSANDRO BIGGI, lo que me lleva a pensar que también estamos ante una de sus obras cuando contemplamos la bóveda de la Familia de Francisco Gómez. 
Ya conocemos la significación de Cronos relacionada con el tiempo aquí representado por un reloj de arena. A diferencia del Cronos del frente de la Bóveda de Berisso, aquí esta despojado de la guadaña.
Conocemos la función otorgada a los ángeles como intermediarios de espacios sagrados y temporales.
Las primeras tres imágenes pertenecen al igual que las dos siguientes a la bóveda de la Familia Gómez. La última foto y para comparar es el dios Cronos del frente de la bóveda de Berisso. La quinta imagen vuelve al Cronos de la cima de la bóveda de Gómez y luego una imagen para comparar el ángel pertenece  al Monumento Funerario de la Familia Muñoz.
RECURSO.
Escultores Urbanos. ALESSANDRO BIGGI
BIGGI Alessandro (Alejandro).- Escultor, Académico, Funcionario. Nació el 19 de noviembre de 1848 en Carrara, Toscana y murió en Fossola, Carrara el 9 de enero de 1926. Estudió en la Academia de Bellas Artes de Carrara donde en 1875 fue nombrado profesor honorario. Luego de una breve permanencia de estudios en Roma integra la representación italiana a la Exposición Universal de Paris de 1889. Entre sus obras en Italia podemos destacar fundamentalmente la realización, en 1892, del monumento a Giuseppe Mazzini y los relieves laterales del monumento a Pellegrino Rossi en la Piazza Gramsci, cuya estatua principal fue ejecutada por Pietro Teneran, ambos en Carrara, el monumento a Felice Cavallotti en La Spezia y aquellos dedicados a Garibaldi en Taranto y en Lerici (1895). También ejecuta obras para las colectividades italianas de Alejandría y El Cairo, en Egipto. Junto su actividad de escultor continúa las actividades de la sociedad familiar de comercio de mármoles transformándola en una gran empresa y ampliando el radio de ventas y comercialización a Sudamérica y los Estados Unidos. Mazziniano y mason presidió la logia “Fantiscritti” de Carrara y fue uno de los fundadores del Partido Republicano en dicha ciudad, ejerciendo el cargo de intendente entre 1899 y 1903. Pasó sus últimos años retirado en la villa que el mismo había proyectado junto con el arquitecto Severini, en la localidad de Fossola en las afueras de Carrara. Sus restos asi como los de su esposa e hijos descansan en el panteón familiar en el cementerio de Fossola y la plaza principal de dicha localidad lleva su nombre.
A los 32 años, en 1880. Llegó a la Argentina, residiendo un tiempo que no debe haber sido muy extenso en Buenos Aires, lo suficiente para efectuar vinculaciones comerciales en dicha ciudad, Montevideo y Rosario, a la que vino para negociar la construcción del monumento a Garibaldi con miembros de la colectividad italiana oportunidad en que fue contactado por la municipalidad sobre la posibilidad construir un monumento para la plaza 25 de mayo. Se conoce una carta del 1 de mayo de 1881 escrita en Buenos Aires en que el escultor envía plano y descripción del monumento y una escritura del 9 de mayo que regula el acuerdo de ejecución alcanzado, fecha en que el escultor había vuelto a Rosario. Más que una radicación fue un viaje de negocios ofreciendo sus servicios de artista y los mármoles de la empresa familiar. Lo cierto es que cuando llegan a Rosario en marzo de 1883 los 51 cajones con las piezas del monumento a la Independencia el encargado de armarlas es el arquitecto Mario Gemignani.
En Buenos Aires realiza el monumento a Nicolas Avellaneda y varias obras en el cementerio la Recoleta como las esculturas del mausoleo Berisso y dos figuras femeninas del mausoleo de Juan Gardey y familia.
En Montevideo el mausoleo Facio en el cementerio del Buceo. También realiza En Rosario es el autor del Monumento a la Constitución emplazado en la Plaza 25 de Mayo (1883) y del monumento a Giuseppe Garibaldi, regalado por la comunidad italiana, que terminara en el patio de la Logia Masónica de Laprida 1029 y hoy día está en el parque Independencia en Bv. Oroño y Cochabamba (1885). La primera es una columna rematada con la figura de la República portando la bandera, y que en su basamento incorpora las estatuas de pie de San Martín, Belgrano, Moreno y Rivadavia. En el Cementerio el Salvador existen varias obras en mármol de su autoría como el panteón de la familia Muñoz y el que actualmente pertenece a la familia Alfonso. También en el Hospital Italiano Garibaldi hay un torso anónimo en mármol firmado por el, en la Dirección del mismo, no saben quien es el representado, seguramente uno de los miembros de la comunidad italiana que aportó alguna suma importante para su construcción o alguno de los que presidieron la Comisión Directiva en los primeros tiempos.













miércoles, 26 de junio de 2019

DETRY. Un friso hermético.

DETRY.  UN FRISO HERMÉTICO.  
Fotos personales tomadas el 6 de mayo de 2019.
Este magnifico friso me resulta totalmente hermético y su significado esquivo. Si bien está firmado no he podido descifrar el nombre de su autor. Tampoco tengo muchos datos sobre la familia titular de este monumento funerario.
RECURSO
¿QUÉ ES UN FRISO?

El friso es la sección central del entablamento, el elemento estructural horizontal que se encuentra sobre las columnas de los templos clásicos. El friso es estrecho y horizontal, y generalmente está decorado. Esta característica fue utilizada por los antiguos griegos por primera vez. En su estilo más antiguo, el orden dórico, el friso estaba decorado con triglifos y metopas alternadas. En el orden jónico, el friso a menudo estaba decorado con relieves de escenas de la historia, la mitología o el estilo griego.
Los romanos continuaron el uso del friso en muchos de sus templos, un estilo revivido por los arquitectos del Renacimiento italiano un milenio después. En este punto, el friso se desasociaba ocasionalmente de otros elementos clásicos, y el término se usaba a veces para describir elementos decorativos horizontales en paredes exteriores o interiores.
El friso en arquitectura 
El friso es una parte prominente de la fórmula clásica para los templos griegos y romanos. Es un elemento ancho y horizontal sobre las columnas que a menudo está decorado, aunque no necesariamente tiene que ser así. Es una parte importante de muchos templos, e ignorarlo sería simplemente criminal.
Ubicación del friso
El templo clásico básico tiene una base, columnas y luego una superestructura en la parte superior. Esta estructura se compone de dos elementos, el entablamento y el frontón. El frontón es la sección triangular, pero el entablamento es la sección ancha y horizontal que descansa directamente en la parte superior de las columnas. En el sistema básico de post-dintel que compone los templos griegos, el entablamento es el dintel.
Aquí es donde encontramos el friso. El entablamento en sí está formado por tres secciones, siendo el friso el que está en el medio. El haz horizontal más bajo es el arquitrabe. Es un elemento estructural que ayuda a soportar el peso del techo. Sentado justo encima de eso está el friso, una sección horizontal con una función menos estructural y más decorativa. Sobre el friso se encuentra la cornisa, la sección horizontal saliente que separa el entablamento y el frontón.
Historia y desarrollo del friso
El friso es una parte importante de los antiguos órdenes arquitectónicos griegos, y ha existido básicamente en la misma medida que la arquitectura clásica. Si bien hay cierta evidencia de elementos similares a un friso en los templos egipcios, fue en las estructuras independientes de piedra de los griegos donde apareció por primera vez.
Orden dórico
El friso es un lugar donde realmente vemos cambios con el tiempo, a medida que los griegos desarrollaban sus diversos órdenes arquitectónicos. En la primera era de los templos griegos, llamada orden dórico, el friso estaba decorado con un patrón consistente y alternante de triglifos y metopas. Un triglifo es un panel de tres líneas verticales, y una metopa es un panel que se deja en blanco o está tallado con relieves. Los templos dóricos son identificables por los patrones alternados de triglifos y metopas en el friso, que según los estudiosos puede haber sido un guiño estilístico a sus antiguos templos de madera, y las vigas de madera que se habrían utilizado en ese lugar para sostener el techo.
Orden jónico
En el segundo orden clásico de la arquitectura, el jónico, el friso cambió de estilo. En lugar de tener un patrón consistente, los frisos jónicos fueron tallados con dramáticos relieves de batallas, monstruos, dioses, héroes o rituales religiosos. El orden final, el corintio, eliminó el friso como un elemento visible, mezclándose con el resto del soporte horizontal para la superestructura.
Hasta el día de hoy, cuando los arquitectos hablan de frisos, casi siempre se refieren a este elemento de un templo dórico o jónico griego. Sin embargo, el friso en realidad no desapareció del uso. Los antiguos romanos usaban el friso con mucha frecuencia, modelando sus propios templos según las órdenes griegas. Después de la caída de Roma, los estilos romanos se revitalizaron mil años más tarde en el Renacimiento italiano.
Los arquitectos del Renacimiento ya no estaban construyendo templos paganos, pero sí lograron que algunas de sus iglesias y edificios pareciesen templos clásicos, con frisos clásicos. También adaptaron motivos clásicos (como el friso) a otros tipos de edificios, aquellos que no parecían templos en absoluto. El uso de un friso puramente decorativo, distinto de un entablamento, se convirtió en una parte de la época barroca altamente decorativa después del Renacimiento también, y se llevó a cabo desde allí.
Hoy en día, puede escuchar a la gente identificar cualquier banda horizontal decorativa que generalmente se coloca en lo alto de una pared como un friso. Frisos modernos como este se pueden encontrar en el exterior de los edificios, generalmente en la fachada, o como un elemento decorativo de las paredes interiores también. No es el friso que los griegos y los romanos habrían reconocido, pero sigue siendo un elemento importante de muchas estructuras que no se debe ignorar. Entonces, la próxima vez que pase uno, congele.











martes, 25 de junio de 2019

JUAN BERISSO VIGNALI Y SOLARI. Escultor ALEJANDRO BIGGI

Juan y Emilio Berisso Vignale y Solari. Obra del Escultor ALESSANDRO BIGGI.
(Sección: 8; Tablón: 24)
Fotos personales tomadas el 6 de mayo de 2019
El constructor de esta obra es JUAN B. SOLER y las esculturas de Alessandro Biggi (1899)
Considerar la puerta con sus vidrios esmerilados con la simbología de las amapolas del sueño eterno. En el frontón el EL OJO DE DIOS O EL OJO QUE TODO LO VE,  enmarcado en un triángulo que nos habla de la Santísima Trinidad. El interior es de forma circular como representación de eternidad y la cúpula coronada con un ángel que nos indica el camino al cielo. 
SIMBOLOGÍA EN EL CORONAMIENTO. A semejanza de la entrada al cementerio encontramos casi la misma simbología en la ornamentación de este edificio entre METOPAS Y TRIGLIFOS.
URNA Y SUDARIO. En general considero que la URNA FUNERARIA que contiene las cenizas del ser querido u homenajeado, al cubrirla con aque3llo que simboliza el EL SUDARIO O MORTAJA DEL RESUCITADO,  se pone de manifiesto la afirmación que la vida no ha terminado en estas cenizas ni con esa urna. Hay un mensaje de esperanza. 
ANTORCHA INVERTIDA. La serie de antorchas, tanto en su posición normal hacia arriba o inclinadas hacia abajo, siempre son una alusión a la LUZ DE LA VIDA que en cualquier posición vencen a las tinieblas de la tristeza y la desesperación. 
CORONAS. Detrás o debajo de toda corona nos encontramos con el círculo que nos habla de eternidad. Nada termina realmente. También las coronas son símbolo del poder de la vida. 
CALAVERA Y LIBRO. En la siguiente METOPA vemos una CALAVERA en la espiritualidad cristiana tiene la función de recordarnos la fragilidad de la vida y la necesidad de no aferrarnos a nada y es un llamado a la humildad frente a la brevedad de la existencia. EL LIBRO DE LA VIDA es una evocación de un texto del último libro del Nuevo Testamento, el Apocalipsis donde se nos recuerda que nuestra vida tiene que ser digna de figurar en ese Libro
CLEPSIDRA. Separada por TRIGLIFOS, en la siguiente METOPA vemos el RELOJ DE ARENA. Este es una afirmación de la urgencia de aprovechar en plenitud del tiempo que se nos concede ahora y aquí.
URNA CUBIERTA CON EL SUDARIO. En la última METOPA a la derecha de esta serie de simbolos se repite la URNA FUNERARIA tal como la vimos a la izquierda de este coronamiento. Siempre es el símbolo de la RESURRECCIÓN que vence a la muerte. 


RECURSOS.
BERISSO, EMILIO (1878 – 1922)
Al ingresar a la segunda calle a la izquierda del camino central, está la bóveda . El constructor fue Juan B. Solar. Dos leones domados flanquean la entrada. Desde la antigüedad el león simboliza el valor. Además a ambos lados, hay dos esculturas o alegorías firmadas por Biggi.
La que vemos a la izquierda, un anciano con barba y alas, en la base tiene un reloj. Representa la muerte con la guadaña. A la derecha, hay un ángel apoyado en un ancla, símbolo de salvación y esperanza.
La bóveda es circular, formando el contorno superior arcos de medio punto y abajo barandas de balustre. El altar de madera dorada a la hoja, en cuyo frente se halla un cordero con banderín negro como símbolo de la Resurrección.
Emilio Berisso nació el 18 de enero de 1878. Su padre Juan Berisso, de origen italiano, fue el fundador del pueblo homónimo próximo a la ciudad de La Plata, Pcia de Buenos Aires.
Berisso publicó a los 15 años su primera poesía “El Payador”. Fue alumno distinguido en el Colegio del Salvador. Se casa con Zulema Castilla. Lector infatigable, usó el seudónimo de “Azrael” en sus escritos. Dominaba varios idiomas. Estrenó en el teatro Apolo de Buenos Aires “La amarra Invisible”
Formó parte del grupo que rodeó a Ruben Darío. Fue un gran dramaturgo.
Falleció el 3 de octubre de 1922.
En el frente de su bóveda se lee la siguiente inscripción “Juan Berisso y Vignale y Solari”.-











lunes, 24 de junio de 2019

LILIANA CROCIATI. Obra del arquitecto WILFREDO VILADRICH

LILIANA CROCIATI.Obra del Arquitecto WILFREDO VILADRICH. 
Fotos personales tomadas el 6 de mayo de 2019 y 1º de marzo de 2022
En este caminar he aprendido a leer, escuchar y descifrar el mensaje que los residentes tiene para quienes peregrinamos por estos senderos. Aspectos en general poco visto en la famosa bóveda de Liliana Crociati. Mi latín no es de los mejores pero supongo que este mensaje debe poder traducirse aproximadamente de la siguiente forma: "Miserere nostri Deus ommiun et respicit nos et ostende nobis lucem miseratium tuam" Traducción tentativa: "Que la misericordia de nuestro Dios sea con todos y nos acoja y nos muestre la luz de su amor"
RECURSOS
Como en general mi vocabulario puede variar en forma algo confuso trato de llegar con ustedes en algún tipo de acuerdo para poder tener en claro ciertas diferencias:
VOCABULARIO
La tumba (en griego, τύμβος tumbos)1 es una edificación o pequeña cámara destinada para depositar a los difuntos. Puede estar parcial o totalmente bajo tierra en un cementerio o dentro de una iglesia o en su cripta. Las tumbas individuales suelen estar selladas, mientras que las familiares o para grupos tienen puertas para acceder a ellas cada vez que fuera necesario.
Una lápida (del latín lapidem, piedra) es una piedra plana que habitualmente lleva grabada una inscripción. El término se utiliza habitualmente para designar a la lápida funeraria: una piedra labrada (en pedernal, granito, mármol, etc.) que marca el lugar donde se encuentra una sepultura. Con frecuencia están esculpidas en forma rectangular, de cruz o alguna otra figura simbólica, y contienen relieves grabados que indican la creencia, ideología, profesión o posición social del difunto, y también llegan a incluirse motivos mitológicos. Generalmente muestran alguna inscripción (el epitafio), fragmentos de textos religiosos o alguna cita alegórica, que por ello se califica como «lapidaria»
El mausoleo es un monumento funerario y sepulcro suntuoso. Etimológicamente proviene del latín: Mausolēum, sepulcro de Mausolo, rey de Caria, quien se hizo construir el famoso Mausoleo de Halicarnaso, una de las llamadas Siete Maravillas del Mundo. Mausolo era uno de los príncipes más ricos y poderosos de su tiempo; a su muerte fue tan llorado por su esposa Artemisa II que ésta para enaltecer la memoria de su amado, mandó construir en Halicarnaso un magnífico sepulcro, cuyo esplendor eclipsaba todo lo que en este género se había visto hasta entonces
Un cenotafio es una tumba vacía o monumento funerario erigido en honor de una persona o grupo de personas para los que se desea guardar un recuerdo especial. Se trata de una edificación simbólica.
Un panteón es un monumento o edificación funeraria donde reposan los restos de los difuntos de una familia o grupo determinado. Puede estar ubicado en un cementerio o tratarse de un edificio exento de grandes dimensiones. Antiguamente también servía para hacer referencia a un templo o edificio sagrado dedicado a todos los dioses de una religión politeísta particular.






domingo, 23 de junio de 2019

RICHAR AIGNER:

RICHARD AIGNER (1867 - 1925)
RUFINA CAMBACERES y RICHARD AIGNER. Cementerio de la Recoleta. Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Foto personal tomada el 18 de septiembre de 2018.
Para mi sorpresa descubro que detrás de las leyendas urbanas que lamentablemente se han construido alrededor de esta bóveda, la más promocionada de este espacio, vengo a descubrir un gran vacío. El creador de esta joya del Art Nouveau fue el arquitecto RICHARD AIGNER (1867-1925), alemán. Eso es todo lo que he podido encontrar tanto en las redes sociales en castellano, o en inglés o francés. Tampoco he encontrado mayor información en la bibliografía relacionada con el tema donde todos repiten estos mismos y tan sobrios datos. 
¿ALGUIEN TIENE MÁS INFORMACIÓN Y ESTÁ DISPUESTO A COMPARTIRLA?





EDOARDO RUBINO o EDUARDO RUBINO. Escultor bóveda BARTOLOMÉ MITRE.

EDUARDO RUBINO. Escultor italiano 
(Fotos personales tomadas el 18 de septiembre de 2018)
UN FASCISTA ENTRE NOSOTROS. Tratando de conocer un poco más sobre los arquitectos que aportaron a la belleza del Cementerio de la Recoleta en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, he comenzado a ver quien es EDOARDO RUBINO o en castellano EDUARDO RUBINO, escultor de la bóveda de Bartolomé Mitre y para mi sorpresa veo que está catalogado, no solo como un escultor que trabajo durante el tiempo del fascismo en Italia sino que fue senador y acusado de haber facilitado el fascismo. 
En esa perspectiva la comprensión del frente de esta bóveda puede admitir una mirada ya no tan inocente y estética, sino que nos lleva a consideraciones políticas e ideológicas inesperadas. Ya no es una obra solo con gran influencia del Art Decó, sino que sugiere el uso de un estilo con fines políticos
Al tener esa información mi mirada sobre las tres alegorías del frente (recuerden que las alegorías son la representación de ideas abstractas usando la figura de personas) me crean ciertas inquietudes: en el centro la Libertad, a un costado la Justicia con ESPADA y esa espada es realmente un problema ideológico y libro de leyes y al otro costado el DEBER que me suena ahora problemática por todas las resonancias de un nacionalismo malsano. Además me llama la atención la fecha en que se realiza esta obra (1938)
Comparta con ustedes este pensamiento como para promover un debate que nos permita crecer y descubrir que este cementerio tiene una reserva de contenidos que es de no creer.
RECURSOS.
EDUARDO RUBINO (1871-1954) Escultor y diseñador italiano. Asiste a diversos cursos en la Academia Albertina de Bellas Artes de Torino, su ciudad natal. Por su arte de estilo ecléctico plasmado en retratos, bustos y monumentos recibe numerosas distinciones. Junto a David Calandra ganan el concurso para realizar el Monumento a Bartolomé Mitre, pero dada la temprana muerte de su compañero debe concluirlo él solo. Es también el autor de la tumba del presidente argentino, en el cementerio de la Recoleta.
ARTE ITALIANA DEL '900
Architettura & Arte in Italia durante il Fascismo
Rubino Edoardo
"Senatori ritenuti responsabili di aver mantenuto il fascismo e resa possibile la guerra sia coi loro voti, sia con azioni individuali, tra cui la propaganda esercitata fuori e dentro il Senato"
"Los senadores se responsabilizaron de mantener el fascismo y hacer posible la guerra tanto con sus votos como con acciones individuales, incluida la propaganda ejercida dentro y fuera del Senado"
Resolución: Orden de decomiso Fecha: 31/07/1945
(Traducción usando Google. Tener en cuenta que mis conocimientos de italiano son sumamente limitados)





FIRMA DE EDOARDO RUBINO EN EL MONUMENTO FUNERARIO MITRE


jueves, 20 de junio de 2019

GIULIO MONTEVERDE. Cristo Crucificado

GIULIO MONTEVERDE . CRISTO CRUCIFICADO. Obra de GIULIO MONTEVERDE 
Fotos personales tomadas el 18 de septiembre 2018 y el 1 de julio de 2019
La capilla del Cementerio es sumamente austera y todas la mirada esta destinadas a contemplar al Cristo en la cruz. Es una obra de arte realizada en un solo bloque de mármol de Carrara. 
Si bien es muy posiblemente una copia, el Ángel de la Resurrección que podemos ver en el monumento funerario de la familia CAMPBELL-LLAMBI también es obra de Giulio Monteverde 
El objetivo tanto de Rivadavia primero y de Mitre después de darle a este espacio un carácter laico y respetuoso de la diversidad de confesiones, tenemos que reconocer que fue un largo proceso no siempre bien resuelto. Es muy posible que en algún momento esta capilla pueda ser usada por las distintas confesiones cristianas de acuerdo a la identidad religiosa de muchas personas y familias que tienen este espacio como memorial familiar. Y si se tiene en cuenta el diálogo interreligiosa en algún momento se podría considerar esta pequeño templo como abierto a todas las expresiones confesionales.
Ademas de la imagen del mismo Giulio Monteverde, incluyo tres imágenes personales del monumento realizado por el mismo escultor en recuerdo de Giuseppe Mazzini. .
RECURSO. 
Monteverde, Giulio 
Este trabajo recopilatorio está dedicado al escultor italiano Giulio Monteverde (1837-1917) Fue un artista muy importante en su época. Como tantos artistas su obra ha sido injustamente olvidada, en los últimos años su trabajo está siendo más recocido.
Giulio Monteverde (Bistagno, Alessandria, Italia, 8 de octubre de 1837 - Roma, 3 de octubre de 1917), escultor italiano.
Hijo de obreros, tras concluir sus estudios elementales, comenzó su actividad artística como tallador de madera realizando numerosos crucifijos como los de la iglesia de San Francesco en Acqui Terme y el de la iglesia de San Secondo en Asti.
Luego de un período de residencia y trabajo en el taller de los Bistolfi en Casale Monferrato, se trasladó a Génova. En esta ciudad prosiguió trabajando como aprendiz en talleres y frecuentó la Academia Ligustica de Bellas Artes donde permaneció cuatro años para luego dirigirse a Roma tras haber ganado la beca de la Academia de San Lucas. Casado muy joven y con hijos no alcanzó a mantener a su familia hasta que su fama se difundió luego que el rey de Wurtemberg adquirió una de sus obras: Niños que juegan con un gato. Aún poco antes de fallecer octogenario sorprendió su trabajo cincelando el mármol para el monumento a Giuseppe Saracco. Fue uno de los principales maestros de la escultora argentina Lola Mora.
Crítica
Durante todo el siglo XX Monteverde ha sido injustamente olvidado o desconocido, esto se debe principalmente a que se trata de un escultor apegado a los cánones tradicionalistas originados en la Grecia clásica y luego reforzados durante el Renacimiento, para la perspectiva del s XX -entonces- Monteverde resultaba "anticuado", fuera de las vanguardias, "academicista" y "remanido".
En efecto, ciertamente cuesta observar algún atisbo de "vanguardismo" en la monumental obra de Monteverde; él se mantiene más cerca -en lo estilístico- de Canova, Cellini y Miguel Ángel. Asimismo ha jugado en su contra el hecho de que muchas de sus esculturas fueran realizadas para cementerios o sus temas fueran en ocasiones rayanos en lo funerario, sin duda La Piedad ha sido para él una escultura ejemplar. Monteverde no parece haber buscado temas que pudieran llamar demasiado la atención: en este sentido puede haber sido tachado –injustamente– de "pacato" y "poco original", peor aún, muchas de sus mejores obras poseen nombres demasiado extensos y algo sensibleros, lo que ha prevenido a los críticos del siglo XX contra él. Sin embargo de todo ello, Giulio Monteverde resulta un escultor excepcional, destacado por su maestría en el cincelado del mármol; mármol que en sus manos adquiere gran ductilidad y un aspecto de increíble fluidez y plasticidad.
En Jenner en el momento de inocular la vacuna a su propio hijo, obra considerada su capolavoro, Monteverde -pese a él mismo- tiene una aproximación a las vanguardias al lograr una corporeidad muy dinámica, como ondulante y llena de tensión, Monteverde ha sabido –a su modo– expresar intensamente la pasión humana.
Principales obras
- Ángel de Monteverde en el Cementerio monumental de Staglieno[(Copia en Panteón de José Manuel Cortina, en Necrópolis Cristóbal Colón de La Habana)].
- Niños que juegan con un gato (1867)
- Monumento a Raffaele Pratolongo (1868)- Génova, Cementerio monumental de Staglieno.
- Colón jovencito (1870)
- Genio de Franklin (1871)
- Jenner en el momento de inocular la vacuna a su propio hijo (1873)- Roma, Galería Nacional de Arte Moderno.
- Monumento a Giuseppe Mazzini (1879)- Plaza Roma, Buenos Aires, Argentina
- Cristo Muerto (1881)- Cementerio de La Recoleta, Buenos Aires Argentina.
- Monumento a Vincenzo Bellini, (1882)
- Monumento a Francesco Oneto (1882)- Génova, Cementerio monumental de Staglieno.
- Tumba Celle (1893)- Génova, Cementerio monumental de Staglieno.
- Idealidad y materialismo (1911)- Roma, Galería Nacional de Arte Moderno.
- El pensamiento- Roma, Vittoriano
- Querer y poder, Madrid
- Giuseppe Saracco (1917), Roma
- Panteón de la familia De La Gándara. Cementerio de San Isidro de Madrid












miércoles, 19 de junio de 2019

LUCIO CORREA MORALES. Escultor de la obra SERENIDAD.

LUCIO CORREA MORALES.ESCULTOR CREADOR DE ESTA OBRA TITULADA SERENIDAD. 
Fotos personales tomadas el 15 de octubre de 2018.
Nuestra memoria tiene el objetivo propuesto de ser vida y presencia de quienes admiramos y queremos. En este caso quiero compartir con ustedes una de las obras que más me han impactado hasta el momento en este espacio. Es la imagen o alegoría que se denomina: SERENIDAD obra firmada de este escultor que hoy convocamos y evocamos. La imagen de esta mujer inclinada sobre un fondo de roca en la cual esta escrita una frase tomada del "Padrenuestro": Que se haga tu voluntad" (Fiat voluntas tua) me han realmente impactado porque pronunciar esta súplica en medio de la Recoleta adquiere una dimensión muy profunda y de un gran compromiso de serenidad. Estas simples palabras pronunciadas en uno de los senderos de este cementerio adquiere un sentido real de paz y serenidad que quiero rescatar y compartir con esa comunidad.
RECURSO.
Lucio Correa Morales (1852-1923)
N
ació en la estancia paterna, en el partido de Navarro, Prov. de Buenos Aires, el 3 de julio de 1852, hijo de Salustiano Correa Morales y de Francisca Navarro de Olivera. Hizo sus primeros estudios en Buenos Aires en la escuela inglesa dirigida por el señor Reynolds , para luego emplearse en la casa de comercio de Correa y Larrazábal.
Desde niño sintió pasión por modelar figuras en madera, valiéndose de un cortaplumas. Guiado por su vocación, comenzó a practicar dibujo con su primo Eduardo L. Holmberg (2), y el famoso naturalista Florentino Ameghino también le dio otros conocimientos rudimentarios.
Aficionado a la escultura, obtuvo una beca por intermedio de Rufino Varela -prominente hombre público-, para perfeccionarse en Europa. En 1874, viajó a Italia, donde ingresó en la Real Academia de Bellas Artes de Florencia, incorporándose al taller del escultor Urbano Lucchesi, con quien estudio seriamente. Aprendió a dominar las técnicas y a cumplir las tareas de modelado. Tuvo allí por compañeros a los pintores José Bouchet, Angel Della Valle, Augusto Ballerini y al escultor Francisco Cafferata. En Europa realizó algunos trabajos que llamaron la atención por su factura artística.
En 1882, regresó a Buenos Aires provisto de una rica experiencia. Vinculado por su parentesco y amistad con Holmberg y Ameghino, formó parte de las expediciones organizadas por ellos a la Sierra de la Ventana y al Chaco Austral. Estos viajes le sirvieron para recoger una valiosa documentación de los tipos autóctonos. Conocedor también de la fauna regional, ejerció durante muchos años la administración del Jardín Zoológico de Buenos Aires, en una de cuyas dependencias tuvo instalado su taller de escultor (3). Aquí se consagró a su profesión y a la enseñanza.
En 1893, fue profesor de escultura en la Academia de Dibujo y Pintura fundada por la Sociedad Estímulo de Bellas Artes, y nacionalizada por el doctor Joaquín V. González durante su ministerio.
Es autor de “La Ondina del Plata” (1880), en el Jardín Botánico; “La Cautiva” (1905), en el Paseo Colón; “La Arquitectura” y “La Agricultura” (1895), en los jardines de la Universidad Nacional de La Plata; el monumento al negro Falucho, inaugurado el 16 de mayo de 1897, el primero que se ejecutó y fundió en el país, hoy ubicado frente a los cuarteles de Palermo, en Luis María Campos y Fitz Roy; la estatua a Fray Justo Santa María de Oro, erigida en 1897, en la ciudad de San Juan, cuna del prócer; el monumento al doctor Ignacio Pirovano, en 1900, en el hospital que lleva su nombre; la estatua de bronce del doctor Francisco Narciso de Laprida, erigida en San Juan (1904); la del presbítero doctor Manuel M. Alberti, levantada en las Barrancas de Belgrano; estatua del Déan Gregorio Funes, en el Parque Sarmiento de la ciudad de Córdoba. En 1913, se inauguró su monumento a Olegario V. Andrade, en Concepción del Uruguay.
Entre otros monumentos ejecutados por Correa Morales figuran el del doctor Carlos Tejedor, emplazado en 1909, en el Parque 3 de Febrero de esta ciudad; el doctor Adolfo Alsina, en Viedma, Río Negro; el de Juan Madero, erigido en 1900, en la Biblioteca de San Fernando (Prov. de Buenos Aires) y el de Santiago de Liniers, inaugurado en 1910, por la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires. En 1908, realizó la estatua de Bartolomé Mitre emplazada en el museo de su nombre.
Largo sería enumerar el centenar de mármoles, bronces, terracotas y yesos que constituyen su obra a través de figuras, retratos y cabezas, algunas de tipos indígenas, con las que propulsó esculturas de carácter eminentemente nacional. Por eso, citaremos lo más representativo: “La Pintura Argentina” (1895), bronce para la tumba del pintor Julio Fernández Villanueva; retrato del escultor Francisco Cafferata, en el Museo Nacional de Bellas Artes; “Abel”, bronce, en el mismo museo; “Melpómene” (1900), mármol en el Museo Provincial de Bellas Artes, de Paraná; “Petrona”, india chaqueña (1904), en el Museo Etnográfico de Buenos Aires; “Veritas Vincit” (1905), grupo en mármol, en el Museo Nacional de Bellas Artes; “Los señores de Onaisin” (1912) grupo en bronce en el Museo Municipal de Bellas Artes “Eduardo Sívori”; “Florentino Ameghino” (1915), yeso, en el Museo Nacional de Ciencias Naturales “Bernardino Rivadavia”; “Caballo herido” (1916), bronce, en el Museo Municipal de Bellas Artes “Juan B. Castagnino”, de Rosario; “Ubi Justitia Libertas” (1907), bronce, en el mismo museo, y “La Educación” (1900), mármol, detalle de un monumento funerario.
Expuso en los Salones Nacionales de 1912, 1914 y 1915. Sus obras obtuvieron importantes premios y figuraron en exposiciones internacionales. Ejerció también la docencia en la Escuela Normal de Profesoras Nº 1, de esta capital, y en la Facultad de Arquitectura, de la Universidad de Buenos Aires. Fue maestro de varios escultores argentinos, entre ellos, Rogelio Yrurtia, Pedro Zonza Briano y Pablo Curatella Manes. Además, fue fotógrafo de calidad (4), guitarrista y flautista; cantaba con mucho gusto y prefería la música italiana.
Falleció en Buenos Aires, el 30 de junio de 1923. Era alegre y ocurrente, pronto de genio, sumamente fuerte. En 1948, la Academia Nacional de Bellas Artes realizó una exposición de sus obras en el Museo Nacional, como un homenaje en el 25º aniversario de su muerte. Figuraron sus obras en las exposiciones “Un Siglo de Arte en la Argentina” (1936); “La Pintura y la Escultura Argentina en este siglo” (1952-53).
Estaba casado con Elina González Acha, quien nació en Mercedes el 20 de enero de 1861 y falleció en Buenos Aires el 13 de agosto de 1942. Fue una destacada educadora y pintora. Tuvieron una hija, Lucía.
Una calle de la ciudad de Buenos Aires lleva su nombre, al igual que una escuela rural del Distrito Cuchilla, Gualeguay, Provincia de Entre Ríos.
Referencias
(1) Anglo Argentine Seminary de Reynolds, escuela inglesa abierta para todo tipo de alumnos.
(2) Eduardo Ladislao Holmberg (1852–1937) médico, profesor, naturalista y escritor.
(3) A Lucio Correa Morales se le atribuye la ornamentación de algunos albergues para animales, como las estatuas y bajos relieves, similares a los de monumentos religiosos hindúes, del Templo de los elefantes y el de los cebúes.
(4) Payró en su libro dedicado al escultor, comenta que Lucio Correa Morales poseía una importante colección de fotografías de aborígenes que él mismo había tomado en diversas expediciones en las que acompañó a los naturalistas por la región del Chaco y por Sierra de la Ventana, entre otros lugares. También cuenta el crítico de arte que el escultor solía recibir en su estudio a indios recién llegados a la ciudad a quienes tomaba como modelo para algunas de sus obras.
Fuente
Cutolo, Vicente Osvaldo – Nuevo Diccionario Biográfico Argentino – Buenos Aires (1971).
Díaz, Marcela Liliana y otros – El Jardín Zoológico de Buenos Aires: Historia y Cultura.
Efemérides – Patricios de Vuelta de Obligado
Payró, Julio E. y otros – Correa Morales – Buenos Aires (1949).