VIRGINIO F. GREGO. Los cuerpos masculinos en placas conmemorativas.
Fotos personales tomadas el 1º de julio de 2019.
Me llama la atención la libertad de mirada se tiene sobre el cuerpo masculino en décadas señaladas por sus actitudes muy patriarcales y machista. Todas estas placas las he encontrado en la bóveda de VIRGINIO F. GREGO, un filántropo hoy un tanto olvidado.
La primera placa encontramos a dos varones que llevan sobre sus hombros y les encuadra una guirnalda de lo que supongo son hojas de tabaco. Las columnas son simple elemento decorativo sin mayor significación.
La segunda placa nos encontramos y con mucha razón con la figura de Mercurio, el dios del comercio con su caduceo en las manos y que hizo crecer los recursos de este industrial del tabaco y ese éxito le permitió ejercer sus acciones filantrópicas que se hace merecedor de la afirmación: "apóstol de la amistad".
La tercera placa muy austera con símbolos del dios del comercio Mercurio que aparece nuevamente y la figura de un hombre que seguramente es alegoría del trabajo.
RECURSO.
Historia del desnudo artístico (Selección)
Historia del desnudo artístico (Selección)
En el desnudo griego masculino es esencial la captación de la energía, de la fuerza vital, que transcribieron mediante dos tipologías de desnudo viril: el atleta y el héroe. En los Juegos Olímpicos era costumbre regalar al ganador un vaso de cerámica —las llamadas «ánforas panatenaicas»— con representaciones de la disciplina atlética ejercida por el laureado, excelente ejemplo de representaciones de desnudos en movimiento, en escenas de acción de gran dinamismo.
El primer exponente del desnudo masculino lo constituyen un tipo de figuras que representan a atletas, dioses o héroes mitológicos, llamadas kouros (kouroi en plural), pertenecientes al periodo arcaico (siglos siglo VII a. C.-siglo V a. C.) —su variante femenina es la koré (korai en plural), que sin embargo solían representar vestida—. Si bien en origen estas figuras denotan una cierta influencia egipcia, pronto los escultores griegos siguieron su propio camino, buscando la mejor forma de representar el cuerpo humano en aras de traslucir su ideal de belleza.
El kouros se caracteriza por la postura hierática, donde predomina la frontalidad, con los pies en el suelo y la pierna izquierda adelantada, los brazos pegados al cuerpo y las manos cerradas, y la cabeza de forma cúbica, con una larga melena y rasgos faciales básicos, destacando su característica sonrisa, denominada «sonrisa arcaica». Los primeros ejemplos datan del siglo VII a. C., procedentes de lugares como Delos, Naxos y Samos, apareciendo generalmente en tumbas y lugares de culto...
Posteriormente, el desnudo tuvo una lenta pero constante evolución desde las formas rígidas y geométricas de los kouroi hasta las líneas suaves y naturalistas del periodo clásico (el llamado estilo severo, desarrollado entre 490 a. C. y 450 a. C.). El principal factor de esta innovación fue un nuevo concepto a la hora de concebir la escultura, pasando de la idealización a la imitación…
En estas obras se denota el culto a la perfección física, que se expresaba principalmente en el atletismo, que conjugaba el vigor físico con la virtud moral y la religiosidad. El nuevo estilo clásico aportó mayor naturalidad no sólo formal, sino vital, al proporcionar movimiento a la figura humana, especialmente con la introducción del contrapposto —atribuido por lo general a Kritios—, donde las diversas partes del cuerpo se contraponen armónicamente, y que proporciona ritmo y equilibrio a la figura…
Mirón realizó con su Discóbolo (450 a. C.) un magnífico ejemplo de figura en movimiento, logrando por primera vez un efecto dinámico coordinado para el conjunto de la figura, ya que hasta entonces las figuras en movimiento estaban realizadas por partes, sin una visión global que proporcionase coherencia a la acción dinámica…
Fidias se dedicó especialmente a esculturas de dioses —era llamado el «hacedor de dioses»—, especialmente Apolo, a los que trataba con una mezcla de naturalismo y ciertos vestigios de la arcaica frontalidad hierática, que otorgaban a sus figuras un aura de majestuosidad, con una equilibrada sintonía entre la fuerza y la gracia, la forma y el ideal.. Sin embargo, también realizó obras de personajes corrientes, con un tratamiento más humano, menos idealizado, como su figura de Anacreonte (circa 450 a. C.).
...Otra importante contribución de Policleto fue el estudio anatómico (la diarthrosis o articulación de las diversas partes del cuerpo), especialmente de la musculación: la perfección de sus torsos ha llevado a que sean apodados en francés cuirasse esthétique(«coraza estética»), y han servido durante mucho tiempo para el diseño de armaduras.
Praxíteles diseñó figuras más humanas... , de gráciles movimientos, con una sensualidad latente, conjugando la potencia física con un cierto aire de gracia, casi de dulzura, con un diseño fluido y delicado.
Con posterioridad, la escultura griega perdió en cierta forma esa unión entre lo físico y lo ideal, encaminándose a figuras más esbeltas y musculosas, donde predominaba la acción por sobre la expresión moral
Lisipo, quizá el último gran nombre de la escultura griega, introdujo un nuevo canon de proporciones, con la cabeza más pequeña, un cuerpo más esbelto y largas piernas,…También introdujo una nueva concepción de la figura humana, menos idealista, más centrada en lo cotidiano y anecdótico…
MERCURIO, CADUCEO, PALMA Y PEBETERO DE INCIENSO.
CADUCEO DE MERCURIO.
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